Cultivo de Zulla (Hedysarum coronarium): Una Planta Versátil y Nutritiva

La zulla, conocido científicamente como *Hedysarum coronarium*, es una planta forrajera perenne que ha ganado popularidad entre los agricultores y ganaderos debido a su capacidad para aportar nutrientes esenciales al suelo y su alto valor nutritivo para el ganado. En este artículo, exploraremos sus características, beneficios y consejos para un cultivo exitoso.

Características del Zulla

La zulla es una leguminosa originaria de la región mediterránea, pero se adapta a diversas condiciones climáticas. Algunas de sus características más destacadas incluyen:

  • – Sistema Radicular Profundo: Su raíz profunda le permite acceder a nutrientes minerales y agua, lo que la hace resistente a condiciones de sequía.
  • – Elevado Contenido de Proteína*: Las hojas de la zulla son ricas en proteínas, lo que lo convierte en un excelente forraje para el ganado.
  • – Mejorador del Suelo: Al ser una leguminosa, tiene la capacidad de fijar nitrógeno atmosférico, mejorando así la fertilidad del suelo en el que se cultiva.

Beneficios del Cultivo de Zulla

  • 1. Aumento de la Fertilización Natural: La zulla contribuye a la mejora de la calidad del suelo al fijar nitrógeno, lo que reduce la necesidad de fertilizantes químicos.

  • 2. Forraje de Alta Calidad: Su alto contenido energético y proteico lo convierte en un forraje ideal para la alimentación del ganado, promoviendo un crecimiento saludable y una mayor producción de leche y carne.

  • 3. Sostenibilidad: Cultivar zulla puede ser parte de una estrategia de agricultura sostenible, ayudando a mantener la biodiversidad y la salud del ecosistema local.

  • 4. Resistencia a Plagas y Enfermedades: Debido a su adaptación natural en diversas condiciones, la zulla presenta una resistencia mayor a plagas y enfermedades en comparación con otras forrajeras.

Requisitos de Cultivo

Para obtener los mejores resultados en el cultivo de zulla, es importante tener en cuenta los siguientes factores:

 1. Suelo

La zulla prefiere suelos bien drenados y ricos en materia orgánica. Un pH ligeramente ácido a neutro (6.0-7.0) es óptimo. Es recomendable realizar un análisis de suelo antes de la siembra para determinar la adecuación de las condiciones.

2. Clima

Esta leguminosa se desarrolla mejor en climas templados mediterráneos. Sin embargo, puede tolerar temperaturas más altas y suelos secos, lo que la convierte en una excelente opción para regiones con climas más cálidos.

3. Siembra

La siembra puede realizarse a finales de invierno o principios de primavera. Se recomienda una densidad de siembra de aproximadamente 15-20 kg por hectárea. Las semillas deben ser sembradas a una profundidad de 2-3 cm.

4. Riego

Es fundamental contar con un suministro adecuado de agua durante las primeras etapas de crecimiento. Sin embargo, una vez establecida, la planta es resistente a la sequía.

5. Cosecha

La zulla puede ser cosechado varias veces al año. Es vital evitar el pastoreo excesivo, permitiendo que la planta se recupere y manteniendo su capacidad forrajera.

El cultivo de zulla (Hedysarum coronarium) no solo ofrece beneficios económicos y nutricionales para la ganadería, sino que también ayuda en la sostenibilidad del suelo y el ecosistema. Al adoptar prácticas de cultivo adecuadas, los agricultores pueden maximizar los beneficios de esta planta versátil y nutritiva, contribuyendo al bienestar de sus explotaciones y al medio ambiente. Si estás considerando diversificar tu producción forrajera, la zulla podría ser una excelente opción para considerar.

6. Usos

Como cultivo forrajero, y/o para la producción de heno o ensilado: Se puede realizar un único corte para heno o ensilado el primer año del cultivo en primavera. En el segundo año de cultivo, se puede optar por realizar también un único corte o dos. Si se opta por un sólo corte este sería en primavera y si se realizan dos cortes uno sería en primavera temprana y el otro en mayo-junio, en función de la localidad. La oferta de forraje en el mercado, principal factor de los precios será el criterio para optar por uno o dos cortes.

Como cultivo pratense:  Para lograr el máximo aprovechamiento de la riqueza alimenticia de la zulla su aprovechamiento se debe realizar cuando la planta adquiera una altura aproximada de 30-40 cm, no debiéndose pastar por debajo de 10 cm ya que esto demoraría el rebrote.

Como abono verde en el segundo año del cultivo debido a su gran producción de materia seca.

Como fijadora de nitrógeno en sistemas de cultivo mixto.